El 24 de mayo se celebra en Argentina el Día del Operador de Radio, una fecha dedicada a destacar y reconocer el rol fundamental de quienes hacen posible que la radio funcione, muchas veces desde el anonimato técnico. La jornada fue establecida oficialmente en 2019 por medio de la Ley N° 7339, impulsada por el legislador Leonardo Yulán, como forma de visibilizar y valorar a quienes operan los controles, manejan los equipos y aseguran que cada palabra, canción o efecto de sonido llegue con precisión a los oyentes.
El origen de la conmemoración está ligado a un hito histórico en las comunicaciones: el 24 de mayo de 1848 se realizó la primera transmisión inalámbrica utilizando el código Morse entre Washington y Baltimore. Aquel acontecimiento marcó el inicio de una nueva era en la transmisión de señales a distancia y sentó las bases de lo que más tarde sería la radiofonía.
Hoy, más de un siglo después, los operadores siguen siendo el corazón técnico de las emisoras. Su trabajo no solo consiste en encender micrófonos y ajustar niveles: también implica instalar, probar, mantener y operar equipos que garanticen una salida al aire constante, limpia y profesional. Son quienes permanecen atentos en cabinas de sonido, con auriculares y pantallas, asegurándose de que todo salga perfecto, incluso cuando hay imprevistos o emergencias.
Muchos operadores de radio trabajan en condiciones poco visibles: en turnos nocturnos, fines de semana o feriados. Sin ellos, la continuidad del aire sería imposible. Por eso, esta jornada también busca reivindicar sus derechos laborales, mejorar sus condiciones y recordar que la radio, por más talento que tenga en la conducción o en la producción, no suena sin quien la opere.
Este 24 de mayo es también una invitación a mirar hacia ese espacio tras el vidrio, donde alguien con precisión técnica y oído entrenado sostiene, todos los días, la magia de la radio.