Morgan Stanley divulgó un informe favorable y ayudó a que continúe la suba de los activos locales. Cuáles son los títulos que podrían tener un rebote
La cercanía de las PASO y un próximo acuerdo con el FMI tras las elecciones legislativas siguen generando cierto entusiasmo entre los inversores. Un informe de Morgan Stanley se subió a la ola y consideró que la deuda argentina presenta “un buen equilibrio entre riesgo y beneficio”. En otras palabras, uno de los bancos de inversión más importantes del mundo consideró que es un buen momento para comprar deuda argentina, aún conociendo las debilidades de la economía.
En las últimas jornadas, las acciones argentinas vienen acumulando subas importantes. El rally continuó ayer con acciones como Edenor que subieron más de 7% en dólares, mientras que los bancos subieron entre 3 y 4% en promedio en Wall Street. Al mismo tiempo, los bonos también presentan mejoras y el riesgo país que venía en la zona de 1.600 puntos finalizó ayer en 1.541 puntos
Se trata de mejoras tibias, pero que marcan un cambio en la tendencia declinante que se acentuó desde que el mercado argentino fuera considerado en junio como “stand alone” por la consultora MSCI, es decir por debajo de la categoría de emergentes.
Para Wall Street un acuerdo con el FMI es “inevitable” ante los grandes vencimientos que se acumulan en los próximos dos años. Según Morgan Stanley, el nuevo programa de facilidades extendidas debería estar firmado entre marzo y abril del año próximo, lo que ayuda a las perspectivas de la deuda local
“Los precios de los bonos siguen siendo lo suficientemente bajos como para dejar un riesgo-recompensa a corto plazo positivo en las elecciones. Apostaríamos a un rebote a partir de una combinación entre los bonos que vencen en 2035 y 2038”. Se trata de los títulos surgidos del canje que pagan los cupones más altos y eso los vuelve más interesantes para los inversores.
El informe coincidió con lo que ven la mayoría de los analistas y brokers: no hay demasiado espacio para que el Gobierno evite un acuerdo con el Fondo mucho más allá del primer trimestre de 2022.
“El año próximo hay vencimientos con el FMI por cerca de 10% del PBI, por lo que no hay muchas alternativas a un programa de facilidades extendidas”, aseguró Morgan Stanley en su informe. En ese sentido, consideró que el acuerdo tendrá metas fiscales y se ocupará de reducir la brecha cambiaria. Esto incluiría “una reducción gradual de controles de capitales y de importaciones”. Claro que al mismo tiempo resaltan que nada de esto será posible sin una reducción del déficit fiscal.
La mejora del clima financiero presenta ahora tres componentes: importante suba del precio de las acciones, mejora gradual de los bonos y mayor estabilidad del tipo de cambio, con un dólar libre que cerró a $ 181,50. Los temores a una disparada luego de las nuevas restricciones impuestas por el Central para operar en el “contado con liquidación” por ahora no se materializaron. Todo indica que el frente cambiario llegará estable sin lugar a dudas a las PASO y probablemente a las elecciones legislativas del 14 de noviembre.
“Es más complicado evaluar si tales ganancias potenciales se mantendrían dados los crecientes desequilibrios macroeconómicos, que es la razón clave por la que no hemos sido más optimistas recientemente”, agregó Morgan Stanley.
En definitiva, Wall Street apuesta a una combinación de factores para volverse un poco más optimista (o algo menos pesimista) con la Argentina: la certeza de un futuro acuerdo con el FMI post elecciones y además un resultado electoral en el que el Gobierno no resulte ganador con contundencia.
Una de las claves es que luego de las elecciones legislativas no se produzca un cimbronazo cambiario a partir de los desequilibrios que se van acumulando. La expectativa es que las señales respecto a un acuerdo con el Fondo y un ajuste fiscal permitan alinear las expectativas y reduzca el peligro de un desborde del tipo de cambio o que se agrande más la brecha.